Luego de la Ascensión de Jesús a los Cielos, los discípulos
regresaron a Jerusalén, tal como el Señor Jesús les había instruido
(Hechos 1:12-14) Entonces regresaron a Jerusalén desde el monte
llamado de los Olivos, que está cerca de Jerusalén, camino de un día de
reposo. (13) Cuando hubieron entrado en la ciudad, subieron
al aposento alto donde estaban hospedados, Pedro, Juan, Jacobo y Andrés, Felipe
y Tomás, Bartolomé y Mateo, Jacobo hijo de Alfeo, Simón el Zelote y Judas,
hijo de Jacobo. (14)
Todos éstos estaban unánimes, entregados de continuo a la oración junto
con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con los hermanos de El.
Es importante mencionar los nombres de los discípulos, no
sólo para conocer sus nombres, sino para hacer evidente que faltaba uno: Judas. Ya no eran doce sino once. Pedro tocó este tema cuando todos se reunieron
en Jerusalén.
(Hechos 1:15-17) Por aquel tiempo Pedro se puso de pie en
medio de los hermanos (un grupo como de ciento veinte personas estaba reunido
allí), y dijo: (16) Hermanos, tenía que cumplirse la Escritura en
que por boca de David el Espíritu Santo predijo acerca de Judas, el que se hizo
guía de los que prendieron a Jesús.
(17) Porque era contado entre
nosotros y recibió parte en este ministerio.
La Escritura a la cual Pedro hace referencia está en los
Salmos:
(Salmo 41:9) Aun mi íntimo amigo en quien yo confiaba, el que de
mi pan comía, contra mí ha levantado su calcañar.
Jesús sabía que alguien lo iba a traicionar, y se los dijo a
sus discípulos:
(Juan 13:18-19) No hablo de todos vosotros; yo conozco a los que he
escogido; pero es para que se cumpla la Escritura: "El que come mi pan ha
levantado contra mi su calcañar."
(19) Os lo digo desde ahora,
antes de que pase, para que cuando suceda, creáis que yo soy.
No sólo sabía que “alguien” lo iba a traicionar, sino que
sabía exactamente quién lo iba a hacer.
Eso lo hizo saber en la última cena de Pascua, pero nadie entendió sino
hasta después…
(Juan 13:21-30) Habiendo dicho Jesús esto, se angustió en espíritu,
y testificó y dijo: En verdad, en verdad os digo que uno de vosotros me
entregará. (22) Los discípulos se miraban unos a otros, y
estaban perplejos sin saber de quién hablaba.
(23) Uno de sus discípulos, el
que Jesús amaba, estaba a la mesa reclinado en el pecho de Jesús. (24)
Por eso Simón Pedro le hizo señas, y le dijo: Dinos de quién habla. (25)
El, recostándose de nuevo sobre el pecho de Jesús, le dijo: Señor,
¿quién es? (26) Entonces Jesús respondió: Es aquel a quien yo
daré el bocado que voy a mojar. Y después de mojar el bocado, lo tomó y se lo
dio a Judas, hijo de Simón Iscariote.
(27) Y después del bocado,
Satanás entró en él. Entonces Jesús le dijo: Lo que vas a hacer, hazlo
pronto. (28) Pero ninguno de los que estaban sentados a la
mesa entendió por qué le dijo esto.
(29) Porque algunos pensaban que
como Judas tenía la bolsa del dinero, Jesús le decía: Compra lo que necesitamos
para la fiesta, o que diera algo a los pobres.
(30) Y Judas, después de recibir
el bocado, salió inmediatamente; y ya era de noche.
En Hechos, Lucas hace un paréntesis para explicar lo que le
pasó a Judas Iscariote…
(Hechos 1:18-20) (Este, pues, con el precio de su infamia
adquirió un terreno, y cayendo de cabeza se reventó por el medio, y todas sus
entrañas se derramaron. (19) Y esto llegó al conocimiento de todos los que
habitaban en Jerusalén, de manera que aquel terreno se llamó en su propia
lengua Acéldama, es decir, campo de sangre.)
(20) Pues en el libro de los
Salmos está escrito: Que sea hecha desierta su morada, y no haya quien habite
en ella; y: que otro tome su cargo.
También Mateo describió lo que pasó con Judas…
(Mateo 27:3-10) Entonces Judas, el que le había entregado,
viendo que Jesús había sido condenado, sintió remordimiento y devolvió las
treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, (4)
diciendo: He pecado entregando sangre inocente. Pero ellos dijeron: A
nosotros, ¿qué? ¡Allá tú! (5) Y él, arrojando las piezas de plata en el
santuario, se marchó; y fue y se ahorcó.
(6) Y los principales sacerdotes
tomaron las piezas de plata, y dijeron: No es lícito ponerlas en el tesoro del
templo, puesto que es precio de sangre.
(7) Y después de celebrar
consejo, compraron con ellas el Campo del Alfarero para sepultura de los
forasteros. (8) Por eso ese campo se ha llamado Campo de
Sangre hasta hoy. (9) Entonces se cumplió lo anunciado por medio
del profeta Jeremías, cuando dijo: Y Tomaron las treinta piezas de plata, el
precio de aquel cuyo precio había sido fijado por los hijos de Israel; (10) y
las dieron por el campo del alfarero, como el señor me había ordenado.
Luego de traer a memoria lo que había sucedido con Judas,
Pedro propuso que eligieran a alguien para ocupar su lugar.
(Hechos 1:21-23) Por tanto, es necesario que de los hombres
que nos han acompañado todo el tiempo que el Señor Jesús vivió entre
nosotros, (22) comenzando desde el bautismo de Juan, hasta
el día en que de entre nosotros fue recibido arriba, uno sea constituido
testigo con nosotros de su resurrección.
(23) Presentaron a dos: a José,
llamado Barsabás (al que también llamaban Justo) y a Matías.
No fue una elección democrática, sino que lo dejaron en
manos de Dios. El método que usaron,
puede sonar extraño, ya que “echaron suertes”.
Pero con eso no querían decir que “lo dejaron a la suerte”. Más bien, ellos confiaban en que Dios revelaría
Su Voluntad a través de esa especie de “sorteo” (de forma similar a como el
Sumo Sacerdote usaba las piedras “Urim y Tumim” escondidas en el
pectoral—Exo. 28:30; Num. 27:21).
(Hechos 1:24-26) Y habiendo orado, dijeron: Tú, Señor, que
conoces el corazón de todos, muéstranos a cuál de estos dos has escogido (25)
para ocupar este ministerio y apostolado, del cual Judas se desvió para irse
al lugar que le correspondía. (26) Echaron suertes y la suerte cayó sobre
Matías, y fue contado con los once apóstoles.
Lo curioso es que a partir de este momento no vuelve a
mencionarse más a Matías. Sin embargo,
hay una mención de los doce apóstoles al final de Apocalipsis, cuando se describe
la Nueva Jerusalén, y tal vez eso explica la necesidad de que hubieran doce
apóstoles (en lugar de sólo once).
(Apocalipsis 21:14) El muro de la ciudad tenía doce cimientos, y en
ellos estaban los doce nombres de los doce apóstoles del Cordero.
Es también importante notar que a partir de este momento, los
doce comenzaron a ser llamados “apóstoles”, y ya no “discípulos”.
Discípulo = seguidor; persona que recibe enseñanzas de un
maestro.
Apóstol= Persona que se dedica a propagar una doctrina o una
idea.
Luego de la muerte de Jesús, los discípulos se transformaron
en “apóstoles”. Ellos comenzaron a
propagar la fe cristiana, comenzando en Jerusalén, luego en Judea y Samaria y
hasta los confines de la Tierra…
Paz de Cristo
ResponderEliminarExcelentes estudios, muchas gracias
Gloria a Dios, sigue adelante.
ResponderEliminarPorqué dice: hasta el día de hoy? ... No es la única parte que lo menciona la palabra
ResponderEliminarhola hermano , soy solo un discípulo mas pero la palabra menciona al día de hoy como presente en cualquier tiempo , si lo lees hoy hasta hoy y si lo lees 30 años mas tarde sigue siendo actual .
EliminarCabe decir que Jesus habìa dicho que esperaran, y Pedro no esperò, sino que se apresurò a escoger quien suplantara a Judas, la suerte recae sobre Matias, pero bien dicho, este no se mensiona màs en la Biblia, ahora quien ocuprà el trono numero 12, pues quien màs, Pablo.
ResponderEliminarLa suerte se echa en el regazo; Mas de Jehová es la decisión de ella.
ResponderEliminarProverbios 16:33
Buenas noches.
ResponderEliminarQue sucede si se escucha en el corazón la frase: Tome otro su oficio.
Como se debe interpretar... Juicio o llamando para cumplir un lugar.
Gracias. 🤝
Como se debe entender el versicver 20 de hechos 1; Como juicio o como llamado.
ResponderEliminarTengo dudas y me gustaría leer otra opinión.
Gracias
Como se debe entender el versículo 20 de hechos 1; Como juicio o como llamado.
ResponderEliminarDios le bendiga por tan buenas enseñanzas, la promesa del bautismo en o con el Espíritu Santo viene en el momento que uno confiesa al Señor como Salvador? es decir: Somos sellados con el Espíritu Santo y al mismo tiempos ocurre el Bautismo? por favor acláreme esto. Gracias
ResponderEliminarEn Hechos 1:20 Tome otro su oficio, fue la orden dada por la escritura, para reemplazar el ministerio de Judas, que cayo por transgresión, y fue otorgado a Matias.
ResponderEliminarCuando el señor Jesucristo estaba en la tierra, el ejercer el apostolado era un oficio o cargo administrativo, el cual podia ser remplazado.
Al igual que la mayoria concuerdo que Matias no heredo ese cargo por que no tenia que ser el Sr Jesus quien eligiera, y pues asi lo hizo con Pablo. Asi que considero que son 12 reemplazando a Judas Pablo.