miércoles, 20 de febrero de 2013

GENESIS 27: Esaú y Jacob




En el capítulo 27 de Génesis volvemos a la historia de los hijos de Isaac: Esaú y Jacob.  Pero comenzaremos con los últimos versículos del capítulo anterior…

ESAU SE CASA
Esaú tomó la decisión de casarse, lo cual es bueno.  Lamentablemente se casó no sólo con una, sino dos mujeres.  Para complicar la situación, ellas eran cananeas, quienes tenían costumbres y valores muy diferentes a los de la familia de Isaac.  La consecuencia de esa mala decisión se hizo evidente pronto…
(Génesis 26:34-35)  Cuando Esaú tenía cuarenta años, se casó con Judit, hija de Beeri hitita, y con Basemat, hija de Elón hitita;  (35)  y ellas hicieron la vida insoportable para Isaac y Rebeca.

Este capítulo comienza con el pesar por las mujeres de Esaú, y terminará con el deseo de los padres a que Jacob se case con una mujer que no sea de Canaán, preferiblemente de su parentela, tal como lo había hecho Isaac.
(Génesis 27:46)  Y Rebeca dijo a Isaac: Estoy cansada de vivir a causa de las hijas de Het; si Jacob toma mujer de las hijas de Het, como éstas, de las hijas de esta tierra, ¿para qué me servirá la vida? 

La Biblia no menciona específicamente qué es lo que hacían las mujeres de Esaú para molestar a Rebeca.  Lo que sí menciona es que ella se sentía tan desesperada que deseaba morir. 

También a Isaac le causaban molestias las mujeres de Esaú.  Sin embargo, él tenía una debilidad hacia Esaú, pues era su favorito. 

CEGUERA DE ISAAC
Isaac tenía un impedimento: no veía bien.  Esto no sólo era en lo físico, sino también en un sentido espiritual. 
(Génesis 27:1-4)  Y aconteció que siendo ya viejo Isaac, y sus ojos demasiado débiles para ver, llamó a Esaú, su hijo mayor, y le dijo: Hijo mío. Y él le respondió: Heme aquí.  (2)  Y dijo Isaac: Mira, yo soy viejo y no sé el día de mi muerte.  (3)  Ahora pues, te ruego, toma tu equipo, tu aljaba y tu arco, sal al campo y tráeme caza;  (4)  y prepárame un buen guisado como a mí me gusta, y tráemelo para que yo coma, y que mi alma te bendiga antes que yo muera. 

A pesar de la conducta desviada de Esaú, él seguía siendo su hijo favorito, y había decidido bendecirlo con la primogenitura antes de morir.  Esto podría parecer normal, pero no debemos olvidar la revelación que Rebeca recibió antes de que los gemelos nacieran y la venta del derecho de primogenitura.

Pero Rebeca no lo olvidó, por lo que decidió actuar para prevenir tal error.
(Génesis 27:5-10)  Rebeca estaba escuchando cuando Isaac hablaba a su hijo Esaú. Y cuando Esaú fue al campo a cazar una pieza para traer a casa ,  (6)  Rebeca habló a su hijo Jacob, diciendo: He aquí, oí a tu padre que hablaba con tu hermano Esaú, diciéndole:  (7)  "Tráeme caza y prepárame un buen guisado para que coma y te bendiga en presencia del SEÑOR antes de mi muerte."  (8)  Ahora pues, hijo mío, obedéceme en lo que te mando.  (9)  Ve ahora al rebaño y tráeme de allí dos de los mejores cabritos de las cabras, y yo prepararé con ellos un buen guisado para tu padre como a él le gusta.  (10)  Entonces se lo llevarás a tu padre, que comerá, para que te bendiga antes de su muerte. 



¿Acaso el engaño es la solución a la ceguera espiritual de Isaac?  Ciertamente sabemos que un mal no borra otro mal, sino sólo lo multiplica.  Rebeca también estaba actuando incorrectamente, aunque “tuviera la razón”.  Por eso Jacob no quería participar de este plan…
(Génesis 27:11-12)  Y Jacob dijo a su madre Rebeca: He aquí, Esaú mi hermano es hombre velludo y yo soy lampiño.  (12)  Quizá mi padre me palpe, y entonces seré para él un engañador y traeré sobre mí una maldición y no una bendición. 

Jacob era temeroso de Dios.  El no quería recibir maldición sino bendición.
Pero su madre insistió, diciéndole que lo libraba de culpa.
(Génesis 27:13)  Pero su madre le respondió: Caiga sobre mí tu maldición, hijo mío; solamente obedéceme, y ve y tráemelos. 

Esta decisión era muy riesgosa por lo que implicaba. Pero la insistencia de Rebeca hace ver una de dos cosas: o ella estaba también cegada por su preferencia por Jacob, o ella estaba convencida de que eso era lo correcto ante los ojos de Dios.

Aun cuando Rebeca tuviera la razón, esa no era excusa para engañar.  La Biblia nos enseña que la forma de vencer el mal es haciendo el bien—no replicando el mal (Rom. 12:21).  Rebeca debió apelar, orar, interceder.  Esto no es “darse por vencido”, sino dejar que Dios haga su obra, mientras que uno hace lo que es justo y correcto.  Pero Rebeca prefirió tomar el asunto en sus propias manos (…como si Dios no pudiera abrir y cerrar puertas, tocar corazones y abrir ojos).  Por tomar la vía fácil y combatir el mal con mal, tanto Rebeca como Jacob tuvieron que pagar un alto costo…como lo veremos en los siguientes capítulos…

Al final, Jacob siguió el consejo de su madre.
(Génesis 27:14-20)  Y él fue, los tomó y los trajo a su madre; y su madre hizo un buen guisado, como a su padre le gustaba.  (15)  Entonces Rebeca tomó las mejores vestiduras de Esaú, su hijo mayor, que tenía ella en la casa, y vistió a Jacob, su hijo menor;  (16)  le puso las pieles de los cabritos sobre las manos y sobre la parte lampiña del cuello,  (17)  y puso el guisado y el pan que había hecho en manos de su hijo Jacob.  (18)  Entonces él fue a su padre, y dijo: Padre mío. Y éste respondió: Aquí estoy. ¿Quién eres, hijo mío?  (19)  Y Jacob dijo a su padre: Soy Esaú tu primogénito. He hecho lo que me dijiste. Levántate, te ruego. Siéntate y come de mi caza para que me bendigas.  (20)  E Isaac dijo a su hijo: ¿Cómo es que la has encontrado tan pronto, hijo mío? Y él respondió: Porque el SEÑOR tu Dios hizo que así me acaeciera. 

Nótese que Jacob dice: el Señor “tu” Dios.  No debe pasarnos por alto que los hijos de Isaac aún no habían reconocido a YHVH como su propio Dios.  Esta es una decisión personal que viene por lo general luego de tener una experiencia personal con Él.



ANTE ISAAC
Cuando Jacob se presentó ante su padre haciéndose pasar por su hermano, Isaac sospechó que quien le hablaba no era Esaú, por lo que le pidió que se acercara para palparlo.
(Génesis 27:21-27)  Isaac entonces dijo a Jacob: Te ruego que te acerques para palparte, hijo mío, a ver si en verdad eres o no mi hijo Esaú.  (22)  Jacob se acercó a Isaac su padre, y él lo palpó y dijo: La voz es la voz de Jacob, pero las manos son las manos de Esaú.  (23)  Y no lo reconoció porque sus manos eran velludas como las de su hermano Esaú, y lo bendijo.  (24)  Y le preguntó: ¿Eres en verdad mi hijo Esaú? Y él respondió: Yo soy.  (25)  Entonces dijo: Sírveme, y comeré de la caza de mi hijo para que yo te bendiga. Y le sirvió, y comió; le trajo también vino, y bebió.  (26)  Y su padre Isaac le dijo: Te ruego que te acerques y me beses, hijo mío.  (27)  Y él se acercó y lo besó; y al notar el olor de sus vestidos, lo bendijo, diciendo: He aquí, el olor de mi hijo es como el aroma de un campo que el SEÑOR ha bendecido. 

Con esta experiencia vemos el grado de ceguera de Isaac.  Era muy fácil engañarlo y manipularlo. Él creyó lo que quería creer, sin tomar en cuenta la evidencia. 

Puede causar conflicto ver a los “héroes de la Biblia” con tales faltas y cometiendo serios errores.  La Biblia no es un cuento de hadas, sino la historia real del pueblo de Dios. Ésta presenta a los patriarcas tal como eran, con sus virtudes y defectos.  Esa es la realidad; no hay nadie perfecto, más que Dios.  Al final, al leerla podemos identificarnos con los personajes y aprender de ellos…
(1 Corintios 10:11-12)  Estas cosas les sucedieron como ejemplo, y fueron escritas como enseñanza para nosotros, para quienes ha llegado el fin de los siglos.  (12)  Por tanto, el que cree que está firme, tenga cuidado, no sea que caiga.

En la próxima entrada leeremos la bendición que Isaac les da a sus hijos y cómo la verdad saldrá a luz…


16 comentarios:

  1. QUE interesante es estudiar la PALABRA DE DIOS

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. verdad , es maravilloso , estoy encantada con estos estudios , lo estoy aplicando a mi hija de 14 años que tambien ama estudiar las escrituras .
      muchas gracias !

      Eliminar
  2. Qué bonito trabajo el de las imágenes.. que Dios los bendiga.

    ResponderEliminar
  3. Dios los bendiga por ayudarnos a enterder su palabra

    ResponderEliminar
  4. Muy buenos los estudios nos ayudan a ampliar nuetro mentalidad

    ResponderEliminar
  5. Muchas gracias por la amplia explicación

    ResponderEliminar
  6. Gracias muy bonita reflexion megusto saque un poquito y ay varios puntos que me interesaron mucho

    ResponderEliminar
  7. Hermosa explicación, muchas gracias

    ResponderEliminar
  8. Agradezco mucho por quienes hacen este blog, me ha ayudado a saborear más la palabra y con más entendimiento , es algo bueno! Les bendigo!

    ResponderEliminar
  9. Muchas gracias por la explicación nos ayuda a entender u ponerlo en practica en nuestra vida

    ResponderEliminar
  10. muy buenas reflexiones ayudan a entender la palabra NOS QUEDA UN APRENDIZAJE PARA APLICARLO A MI VIDA

    ResponderEliminar
  11. Dios bendiga a todos y cada uno de los que contibullen para que está enseñanza llegue asta nosotros para mí es de gran bendición

    ResponderEliminar
  12. Conocer de las virtudes y defectos de los grandes hombres de Dios, nos enseña que tenemos que esforzarnos para caminar en la forma que nuestro Padre ha establecido.
    No es fácil, con la ayuda y conocimiento de la Palabra de Dios, estamos en el buen camino.

    ResponderEliminar
  13. Que hermoso es el estudio. gracias hna. Ana. me sirve para compartirlo con mis hermanos que gracias a DIOS están también en sus caminos Bendiciones.

    ResponderEliminar

Son bienvenidos las dudas y comentarios (con el entendido que se hagan con respeto)...