domingo, 22 de octubre de 2017

EXODO 40: Consagración del Tabernáculo


Los israelitas terminaron de construir el Tabernáculo, y la Biblia dice que lo hicieron siguiendo las instrucciones que Dios le había dado a Moisés.
(Éxodo 39:32) Así fue acabada toda la obra del tabernáculo, del tabernáculo de reunión; e hicieron los hijos de Israel como Jehová lo había mandado a Moisés; así lo hicieron.

Al final del capítulo 39 hace una lista de todos los muebles y las piezas que se hicieron para el Tabernáculo, incluyendo las vestiduras sacerdotales (Exo. 39:33-41).

Los maestros de obra y los artesanos entregaron a Moisés todas las piezas del Tabernáculo. Y Moisés se encargó de inspeccionar y revisar que todo estuviera en orden, y hecho tal como Dios se lo había mostrado.
(Éxodo 39:42-43) En conformidad a todas las cosas que Jehová había mandado a Moisés, así hicieron los hijos de Israel toda la obra. Y vio Moisés toda la obra, y he aquí que la habían hecho como Jehová había mandado; y los bendijo.

Cada pieza es importante, ya que cumple un propósito especial. De igual manera, cada miembro del cuerpo de Cristo es especial y cumple un propósito único (Rom. 12:4-8).


COMO DIOS MANDÓ
Hay un mensaje que se repite con insistencia en este capítulo: “como Jehová había mandado a Moisés” (Exo. 40:16,21,23,25,27,29,32). Como hemos visto a lo largo del estudio del Tabernáculo, éste nos muestra el camino que debemos andar para llegar a la Presencia de Dios. Si queremos acercarnos a Dios, debemos hacerlo como Él lo pide, y no a nuestra manera.
(Éxodo 40:16) Y Moisés hizo conforme a todo lo que Jehová le mandó; así lo hizo.

Moisés no sólo revisó que todo en el Tabernáculo estuviera hecho según las instrucciones divinas, sino que él mismo fue quien colocó todo en su lugar (en esa primera ocasión, antes que los sacerdotes fueran consagrados para ese propósito). Luego que hubieran armado el Santuario, Moisés metió el Arca del Pacto en el Lugar Santísimo (la cual había estado bajo su cuidado en la tienda de reunión).
(Éxodo 40:20-21) Y tomó el testimonio y lo puso dentro del arca, y colocó las varas en el arca, y encima el propiciatorio sobre el arca. Luego metió el arca en el tabernáculo, y puso el velo extendido, y ocultó el arca del testimonio, como Jehová había mandado a Moisés.

Probablemente Moisés necesito de ayuda para cargar los muebles, pero él se encargó personalmente de colocarlos en el Tabernáculo. La Biblia dice que puso la mesa de los panes, el candelabro y el altar de incienso, “tal como Jehová había mandado” (Exo. 40:22-33). También Moisés lo estrenó, colocando los primeros panes, encendiendo las lámparas por primera vez, y quemando el primer incienso aromático.

Moisés comenzó de adentro (el Santuario) para afuera (Atrio exterior). Luego de colocar los muebles del Lugar Santo, cerró el Santuario con la cortina (Exo. 40:28), y pasó a colocar el Altar del Holocausto y la Fuente de agua en el Atrio exterior (Exo. 40:29-32). Lo último que levantaron fueron las cortinas exteriores del atrio, y la cortina de la entrada principal (Exo. 40:33).

UN NUEVO INICIO
El Tabernáculo no fue levantado cualquier día. Dios escogió el primer día del año en el calendario bíblico (Nisán 1), marcando así un nuevo inicio.
(Éxodo 40:1-2) Luego Jehová habló a Moisés, diciendo: En el primer día del mes primero harás levantar el tabernáculo, el tabernáculo de reunión.

Un año después que salieron de Egipto, los israelitas estaban al pie del Monte Sinai, inaugurando el Tabernáculo.
(Éxodo 40:17) Así, en el día primero del primer mes, en el segundo año, el tabernáculo fue erigido.

En ese día (1 de Nisán) se armó el Tabernáculo, y todo fue puesto en su lugar (Exo. 40:18-19).

LUGAR DE REUNIÓN
Como ya mencionamos, el diseño del Tabernáculo representa el camino de regreso a Dios. Comenzando en la puerta, pasando por el Atrio y el Lugar Santo, hasta llegar al Lugar Santísimo, nos enseña el camino que debemos avanzar para llegar a la Presencia de Dios.
(Éxodo 29:43-46) Allí me reuniré con los hijos de Israel; y el lugar será santificado con mi gloria. Y santificaré el tabernáculo de reunión y el altar; santificaré asimismo a Aarón y a sus hijos, para que sean mis sacerdotes. Y habitaré entre los hijos de Israel, y seré su Dios. Y conocerán que yo soy Jehová su Dios, que los saqué de la tierra de Egipto, para habitar en medio de ellos. Yo Jehová su Dios.

El Tabernáculo funciona como un “portal” que conecta la Tierra con el Cielo.  Es el lugar de encuentro entre Dios y Su pueblo.

CONSAGRACIÓN
El Tabernáculo no era un lugar cualquiera. Este lugar debía ser apartado y dedicado para servir a Dios (no a los hombres), en otras palabras, debía ser “santificado”. Y como señal de esta consagración, Dios pidió que todo el Tabernáculo fuera ungido con el aceite especial de unción (Exo. 30:23-29).
(Éxodo 40:9-11) Y tomarás el aceite de la unción y ungirás el tabernáculo, y todo lo que está en él; y lo santificarás con todos sus utensilios, y será santo. Ungirás también el altar del holocausto y todos sus utensilios; y santificarás el altar, y será un altar santísimo. Asimismo, ungirás la fuente y su base, y la santificarás.

No sólo los muebles y cosas iban a ser santificadas, sino también las personas que allí iban a servir, es decir, los sacerdotes (Exo. 30:30-33). Pero antes de ser ungidos, los sacerdotes debían lavarse y ponerse las vestiduras especiales para su servicio.
(Éxodo 40:12-15) llevarás a Aarón y a sus hijos a la puerta del tabernáculo de reunión, y los lavarás con agua. Y harás vestir a Aarón las vestiduras sagradas, y lo ungirás, y lo consagrarás, para que sea mi sacerdote. Después harás que se acerquen sus hijos, y les vestirás las túnicas; y los ungirás, como ungiste a su padre, y serán mis sacerdotes, y su unción les servirá por sacerdocio perpetuo, por sus generaciones.

LA PRESENCIA DE DIOS
Moisés y los levitas prepararon el Tabernáculo. Ya todas las piezas estaban en su lugar. Sólo una cosa hacía falta: que la Presencia de Dios descendiera en el Santuario. El pueblo preparó el lugar, y la Presencia de Dios descendió allí:
(Éxodo 40:34) Entonces una nube cubrió el tabernáculo de reunión, y la gloria de Jehová llenó el tabernáculo.

Cuando la gloria de Dios desciende sobre un lugar, efectivamente “lo llena”. Nadie más puede estar en Su Presencia.
(Éxodo 40:35) Y no podía Moisés entrar en el tabernáculo de reunión, porque la nube estaba sobre él, y la gloria de Jehová lo llenaba.

En ese momento, la gloria de Dios llenó el Santuario. Aunque más tarde se levantó la nube de la Presencia, ésta no los dejó. La nube permaneció sobre el Tabernáculo de día y de noche.
(Éxodo 40:38) Porque la nube de Jehová estaba de día sobre el tabernáculo, y el fuego estaba de noche sobre él, a vista de toda la casa de Israel, en todas sus jornadas.

El libro de Números hace mención de este evento, y explica que la nube servía de sombra al campamento durante el día, y de noche se convertía en una nube de fuego.
(Números 9:15-16) El día que el tabernáculo fue erigido, la nube cubrió el tabernáculo sobre la tienda del testimonio; y a la tarde había sobre el tabernáculo como una apariencia de fuego, hasta la mañana. Así era continuamente: la nube lo cubría de día, y de noche la apariencia de fuego.

La Nube no sólo servía para dar sombra de día y luz de noche, sino también cumplía otro propósito importante: servía como guía en el camino de los israelitas por el desierto. Cuando la nube se movía, esta era la señal para que el pueblo empacara y comenzara a moverse, en dirección a donde la nube los llevara. Dios no acompañaba a Israel donde ellos iban, sino al revés: Israel debía seguir a Dios, donde la Nube los dirigiera.
(Éxodo 40:36-37) Y cuando la nube se alzaba del tabernáculo, los hijos de Israel se movían en todas sus jornadas; pero si la nube no se alzaba, no se movían hasta el día en que ella se alzaba.

Los israelitas dependían de la sombra y el calor de la nube para sobrevivir en el clima inclemente del desierto. La nube servía a Israel como protección, y también para dirección.
(Números 9:17-23) Cuando se alzaba la nube del tabernáculo, los hijos de Israel partían; y en el lugar donde la nube paraba, allí acampaban los hijos de Israel. Al mandato de Jehová los hijos de Israel partían, y al mandato de Jehová acampaban; todos los días que la nube estaba sobre el tabernáculo, permanecían acampados. Cuando la nube se detenía sobre el tabernáculo muchos días, entonces los hijos de Israel guardaban la ordenanza de Jehová, y no partían. Y cuando la nube estaba sobre el tabernáculo pocos días, al mandato de Jehová acampaban, y al mandato de Jehová partían. Y cuando la nube se detenía desde la tarde hasta la mañana, o cuando a la mañana la nube se levantaba, ellos partían; o si había estado un día, y a la noche la nube se levantaba, entonces partían. O si dos días, o un mes, o un año, mientras la nube se detenía sobre el tabernáculo permaneciendo sobre él, los hijos de Israel seguían acampados, y no se movían; mas cuando ella se alzaba, ellos partían. Al mandato de Jehová acampaban, y al mandato de Jehová partían, guardando la ordenanza de Jehová como Jehová lo había dicho por medio de Moisés.


TAMBIÉN EN EL TEMPLO
Así como la Presencia de Dios descendió sobre el Tabernáculo en el desierto, también sucedió lo mismo cuando fue inaugurado el Templo en Jerusalén, en tiempos de Salomón.
(1 Reyes 8:10-11) Y cuando los sacerdotes salieron del santuario, la nube llenó la casa de Jehová. Y los sacerdotes no pudieron permanecer para ministrar por causa de la nube; porque la gloria de Jehová había llenado la casa de Jehová.


TEMA DEL LIBRO
El Libro de Éxodo (heb. Shemot) concluye con la presencia de Dios descendiendo sobre el Tabernáculo que estaba en medio del campamento de los Hijos de Israel. Esta es la culminación de la Redención, que es el tema central del libro. 

La Redención no implica “llegar al cielo o la Tierra Prometida” sino “restablecer la perfecta comunión con Dios”, tal como la tenía Adán en el Edén.

Los versículos claves que resumen el libro de Éxodo son los siguientes:
(Éxodo 29:45-46) Y habitaré entre los hijos de Israel, y seré su Dios. Y conocerán que yo soy Jehová su Dios, que los saqué de la tierra de Egipto, para habitar en medio de ellos. Yo Jehová su Dios.

***

Llegamos al capítulo final del estudio del libro de Éxodo. Gracias por acompañarnos. Pronto comenzaremos un nuevo estudio bíblico, que seguiremos compartiendo en nuesto blog: Estudio Biblia.


Estudios de otros capítulos de este libro: Éxodo
Clase virtual de este libro: Audio de Éxodo
También en Video de YouTube (Canal: Cita Divina)


10 comentarios:

  1. quisiera empezar levitico con uds :(

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    1. Nuestra intención es estudiar todos los libros de la Biblia. Eventualmente estudiaremos Levítico. Mientras tanto, le invitamos a acompañarnos en el estudio que estamos haciendo ahora.

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  2. Feliz día 🌴
    Que gozó encontrar esta Página.
    Excelente para Estudiar.
    Cómo dicen en mi tierra
    Aquí estoy y Aquí me tiene pa Rato.
    Soy Colombiana.
    Dios 😇 los bendiga.

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  3. Tabernaculo Antiguo Testamento y Jesús Nuevo Testamento. Jehová tabernaculizó no existe este verbo, pero Jehová ocupó tiempo y espacio en la persona de Jesus de Nazaret. El Verbo se hizo Carne. Jesús es Dios.

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  4. amen. Gloria a Dios me ha servido de mucho el estydio, Dios los bendiga

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  5. Muchas gracias por su aporte, ha sido de mucha ayuda, que Jehová se lo multiplique.

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  6. Dios les bendiga es una bendicion estos estudios

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Son bienvenidos las dudas y comentarios (con el entendido que se hagan con respeto)...