En los últimos versículos de Daniel 11 aún están pendientes de cumplirse, y se harán manifiestos en la figura del “anticristo” en los tiempos del fin.
FIGURA DEL ANTICRISTO
Los siguientes versículos, aunque hablan de Antíoco, también dan detalles muy reveladores sobre el anticristo que está por venir. Tanto Antíoco IV como el anticristo son líderes que se levantan en el espíritu de Satanás, en rebelión en contra de Dios.
(Daniel 11:36-39) Y el rey hará su voluntad, y se ensoberbecerá, y se engrandecerá sobre todo dios; y contra el Dios de los dioses hablará maravillas, y prosperará, hasta que sea consumada la ira; porque lo determinado se cumplirá. Del Dios de sus padres no hará caso, ni del amor de las mujeres; ni respetará a dios alguno, porque sobre todo se engrandecerá. Mas honrará en su lugar al dios de las fortalezas, dios que sus padres no conocieron; lo honrará con oro y plata, con piedras preciosas y con cosas de gran precio. Con un dios ajeno se hará de las fortalezas más inexpugnables, y colmará de honores a los que le reconozcan, y por precio repartirá la tierra.
En Apocalipisis, al anticristo también se le conoce como “la bestia” (Apoc. 13:1-10), tal como lo describe Juan en su visión de los últimos tiempos:
(Apocalipsis 13:6-7) Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar su Nombre, y su Tabernáculo, y los que moran en el cielo. Y le fue dado hacer guerra contra los santos, y vencerlos. También le fue dada potencia sobre toda tribu y pueblo y lengua y gente.
CAIDA DE ANTIOCO
Los últimos versículos del capítulo 11 hablan del final de Antíoco. Él todavía tuvo conflictos con Egipto, pero los vencerá; sin embargo, la profecía señala que no va a poder conquistar varias tierras: Edom, Moab y Amón.
(Daniel 11:40-43) Pero al cabo del tiempo el rey del sur contenderá con él; y el rey del norte se levantará contra él como una tempestad, con carros y gente de a caballo, y muchas naves; y entrará por las tierras, e inundará, y pasará. Entrará a la tierra gloriosa, y muchas provincias caerán; mas éstas escaparán de su mano: Edom y Moab, y la mayoría de los hijos de Amón. Extenderá su mano contra las tierras, y no escapará el país de Egipto. Y se apoderará de los tesoros de oro y plata, y de todas las cosas preciosas de Egipto; y los de Libia y de Etiopía le seguirán.
Aunque haya vencido a Egipto, Antíoco comenzó a tener derrotas, y terminó su reinado.
(Daniel 11:44-45) Pero noticias del oriente y del norte lo atemorizarán, y saldrá con gran ira para destruir y matar a muchos. Y plantará las tiendas de su palacio entre los mares y el monte glorioso y santo; mas llegará a su fin, y no tendrá quien le ayude.
El fin de Antíoco llegó por la mano de Dios, quien lo castigó con una enfermedad extraña e incurable—y nadie pudo ayudarlo, como dice la profecía. La historia del fin de Antíoco está descrita en el capítulo 9 del segundo libro de los Macabeos (ver final del video de Daniel 8).
TIEMPO DEL FIN
La mayoría de los estudios teológicos señalan que las profecías de Daniel 11 ya se cumplieron. Eso es cierto en parte, ya que la historia lo comprueba; sin embargo, también sabemos por el testimonio del libro de Daniel que estas palabras se refieren especialmente al tiempo final (heb. Et Ketz).
(Daniel 8:17) El se acercó adonde yo estaba, y cuando llegó, me aterroricé y caí sobre mi rostro, pero él me dijo: Entiende, hijo de hombre, que la visión se refiere al tiempo del fin.
(Daniel 8:26) Y la visión de las tardes y de las mañanas que ha sido relatada, es verdadera; pero tú, guarda en secreto la visión, porque se refiere a muchos días aún lejanos (heb. Yamim Rabim).
También en el capítulo doce, el Señor le revela a Daniel que estas últimas profecías están selladas para su cumplimiento en el tiempo del fin.
(Daniel 12:4) Pero tú, Daniel, guarda en secreto estas palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin…
(Daniel 12:9) Y él respondió: Anda, Daniel, porque estas palabras están cerradas y selladas hasta el tiempo del fin.
Otra forma en que se expresa este tiempo es:
(Daniel 8:19) Y dijo: He aquí, te voy a dar a conocer lo que sucederá al final de la ira, porque se refiere al tiempo señalado del fin. (heb. L´Moed Ketz)
Lo que se traduce como “tiempo señalado”, en hebreo es: “Moed” que es: tiempo especial, cita divina, y se usa para las fiestas. Sabemos que la fiesta que está vinculada con el fin del pecado y la iniquidad es el “Día de Expiación” (heb. Yom Kipur), que también es conocido a lo largo de la Biblia como: “Día del Señor”. Ese será el día de la segunda venida del Mesías, quien vendrá como Rey y como Juez del mundo, después de lo cual comenzará el Reino Mesiánico, durante mil años.
SEÑAL ANTES DE SU VENIDA
Hay muchas señales del fin (Mateo 24, Apocalipsis)…pero hay una que menciona Daniel con claridad: la abominación desoladora (Dan. 9:27; Dan. 12:11). En referencia a la profecía que le fue dada a Daniel, Jesús dijo que ésta sería una señal de los tiempos finales, antes de su venida (Mateo 24):
(Mateo 24:15-16) Por tanto, cuando veáis la abominación de la desolación, de que se habló por medio del profeta Daniel, colocada en el lugar santo (el que lea, que entienda), entonces los que estén en Judea, huyan a los montes.
Jesús estaba hablando de un cumplimiento futuro (no el de Antíoco, pues ese ya había sucedido); más bien, estaba haciendo referencia a un evento futuro. La advertencia fue útil a los creyentes, muchos de los cuales huyeron cuando los romanos destruyeron el Templo en el año 70 d.C. Pero aún eso podemos contarlo como “sombra”, pues aún no era el “tiempo del fin”. El cumplimiento final se refiere a “la abominación” relacionada con el anticristo.
Pablo lo confirma, explicando que la señal que debemos esperar ANTES de la Venida del Señor es: la abominación desoladora y la manifestación del hijo de perdición (anticristo):
(2 Tesalonicenses 2:1-4) Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos, que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el día del Señor está cerca. Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.
Pablo explica que el espíritu del anticristo ya se ha manifestado en el mundo (en la forma de Antíoco IV, Hitler, entre otros); pero éstos son sólo sombra. El “hombre de perdición” (anticristo) está retenido hasta que llegue el tiempo determinado por Dios, y se manifestará en el tiempo del fin (heb. Et Ketz).
(2 Tesalonicenses 2:7-10) Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos.
¿Por qué Dios permite que el anticristo tome poder—aunque sea por un tiempo? Pablo lo explica a continuación:
(2 Tesalonicenses 2:11-12) Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia.
En la próxima entrada concluiremos con el estudio del libro de Daniel, estudiando el capítulo 12…
Lección anterior: Daniel 11:15-35
Lección siguiente: Daniel 12a
Gracias ANA que hermoso estudio, Dios te bendiga.. me complace en leer el libro de Daniel otra vez aunque ya lo leí en el estudio de un ayuno con tu ayuda mi apreciada Ana.. que maravilla es entender que estamos en tiempos del fin y que somos la generación que vemos el cumplimiento y los acontecimientos o señales antes de que se manifieste el inicuo.. Bendito se Dios y nuestro Padre y Señor Jesucristo que con su amor y su misericordia nos ama y nos revela su palabra usando a su Sierva Ana.. Gracias Dios mio.. estamos haciendo lo que tu nos dijiste en Lucas 21.28 cuando estas cosas comiencen a suceder, erguios y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención esta cerca.. y también limpiando nuestras vestiduras en la sangre de nuestro Salvador Jesucristo para aquel glorioso día del Arrebatamiento. nos estamos preparando mirando por nosotros mismos en nuestros corazones que no se carguen de glotonerías y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre nosotros aquel dia,.....estamos pues en vela en todo tiempo orando para que seamos tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán y de estar en pie delante del hijo del Hombre.. Att.. Jober Falcon Ecuador..
ResponderEliminarSaludos, Jober. AMEN a todo lo has escrito. Y gracias por las palabras de ánimo. Muchas bendiciones a ti también.
EliminarAmén Gloria a Dios amén, bendiciones para todos amén
Eliminarmuy hermoso el estudio de las santas escrituras , es una maravilla es
ResponderEliminarel libro de DANIEL , gracias venditos hijos de DIOS por el estudio biblico DIOS LOS vendiga siempre en su ministerio
Amén
EliminarAmén
Eliminar? quiere decir que esa profecía de la abominación desoladora tiene doble cumplimiento ? Con Antíoco y con el hombre de pecado de 2 tasalonica 2:1-9
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