viernes, 11 de julio de 2025

NUMEROS 3c (3:11-16;39-51) Los Levitas y la Redención de los Primogénitos

 


En este episodio concluiremos el capítulo tres con dos temas conectados: 
1. Conteo de los levitas a partir de un mes de edad;
2. Sustitución de los primogénitos por los levitas. 

DIFERENCIA DE EDAD EN LOS CENSOS
A diferencia de censo general de las otras tribus, que contaban a los varones a partir de los 20 años, la variación con la tribu de Levi fue que se contaron a los varones a partir de un mes
(Números 3:14-16) Y Jehová habló a Moisés en el desierto de Sinaí, diciendo: Cuenta los hijos de Leví según las casas de sus padres, por sus familias; contarás todos los varones de un mes arriba. Y Moisés los contó conforme a la palabra de Jehová, como le fue mandado.
 
La diferencia se debe al propósito de cada censo: 
* El censo general era para los hombres que iban a participar en la guerra
* El censo de los levitas era para aquellos que iban a ser dedicados al Señor.

La pregunta ahora es: ¿qué tiene que ver la dedicación de los levitas con el conteo a partir de un mes? 

En resumen: La razón es porque Dios determinó que los levitas tomarán el lugar de los primogénitos de Israel, y los primogénitos eran redimidos a la edad de un mes. Sabiendo esto, veamos ahora los detalles que explican esto: 

DEDICACIÓN A LA EDAD DE UN MES
La tradición de dedicar a los hijos primogénitos al cumplir el mes de edad se remonta al tiempo en que los israelitas salieron de Egipto. No es una tradición humana, sino que es una instrucción dada por Dios: 
(Éxodo13:1-2) Jehová habló a Moisés, diciendo: Conságrame todo primogénito. Cualquiera que abre matriz entre los hijos de Israel, así de los hombres como de los animales, mío es.

¿Por qué pidió Dios a todo primogénito? La Biblia dice que es para que los israelitas recuerden que Dios los salvó de morir.

En la noche del 14 Nisán, en esa primera Pascua, todo primogénito en Egipto murió. Sólo los primogénitos de los israelitas se salvaron, gracias a la sangre derramada del Cordero de la Pascua. Cuando el ángel veía la sangre en la puerta, se saltaba esa casa, y los primeros nacidos en ese hogar eran salvados de la muerte. Esta es una imagen profética de la obra salvadora de Jesús, el Cordero de Dios, para todo aquel que crea en Él (Juan 3:16). 

Dios salvó a todos los primogénitos de Israel, y a partir de ese momento, Dios pidió que todo primogénito fuera consagrado para Él (Éxodo 13:11-12). 

“Consagrar” en hebreo es: Kadash, que también significa: santificar, dedicar, separar. Consagrar es apartar algo o alguien para ser dedicado a un propósito especial. 

El primogénito es el que abre una nueva generación, y representa el futuro de una familia. Si el primogénito es dedicado a Dios, esto influirá positivamente en el resto de los hijos. Esto es un principio espiritual, que dice que si lo primero es dedicado a Dios, también influirá en el resto, tal como dice Pablo:
(Romanos 11:16) Si las primicias son santas, también lo es la masa restante; y si la raíz es santa, también lo son las ramas.

A lo largo de la Biblia encontramos el principio de la PRIMICIA, es decir, que todo lo primero es para Dios. Es un ejercicio de la voluntad para poner a Dios en primer lugar en nuestras vidas.

OPCIÓN DE REDENCIÓN
La consagración del primogénito no implicaba que “debía morir”, sino que él debía vivir dedicado al servicio de Dios. Todo padre debía tener la conciencia de que su hijo primogénito no le pertenecía, sino que era de Dios. 

Las instrucciones de Dios dicen que las primicias de los animales debían ser sacrificadas, pero los primogénitos de los hombres debían ser redimidos. 
(Éxodo 13:15) y endureciéndose Faraón para no dejarnos ir, Jehová hizo morir en la tierra de Egipto a todo primogénito, desde el primogénito humano hasta el primogénito de la bestia; y por esta causa yo sacrifico para Jehová todo primogénito macho, y redimo al primogénito de mis hijos.

Dios dio a los padres israelitas la oportunidad de REDIMIR AL PRIMOGÉNITO. En otras palabras, los padres podían pagar un precio simbólico para que el hijo pudiera seguir viviendo con la familia en lugar de dedicarse exclusivamente al servicio de Dios. El precio de la redención era el siguiente:
(Números 18:16) En cuanto a su redención, de un mes los redimirás, según tu valuación, por cinco siclos en plata, según el siclo del santuario que es de veinte geras. 

Esto es lo que se conoce como “la Redención del Primogénito” (heb. Pidyon Haben). Cuando el hijo primogénito cumple un mes de nacido, éste es llevado ante un sacerdote levita a quien se le entrega el precio de redención del primogénito. El precio del rescate son cinco monedas de plata (o el equivalente según el precio de mercado de la plata, calculando que cada moneda de plata pesaba cerca de 100 gramos).

Basado en esto, ahora podemos entender el censo que Dios pidió en relación a la tribu de Levi…

LEVITAS SUSTITUYEN A LOS PRIMOGÉNITOS
La razón por la que el censo de los Levitas se hizo contándolos a partir de un mes de edad, es porque los levitas van a tomar el lugar de los primogénitos. 
(Números 3:11-13) Habló además Jehová a Moisés, diciendo: He aquí, yo he tomado a los levitas de entre los hijos de Israel en lugar de todos los primogénitos, los primeros nacidos entre los hijos de Israel; serán, pues, míos los levitas. Porque mío es todo primogénito; desde el día en que yo hice morir a todos los primogénitos en la tierra de Egipto, santifiqué para mí a todos los primogénitos en Israel, así de hombres como de animales; míos serán. Yo Jehová.

A partir de este momento histórico, Dios determinó que toda la tribu de Levi sería apartada para dedicarse a servirlo, tomando el lugar de los primogénitos.
En ese día contaron a los levitas, y éste fue el resultado del censo: 22,000 levitas.
(Números 3:39) Todos los contados de los levitas, que Moisés y Aarón conforme a la palabra de Jehová contaron por sus familias, todos los varones de un mes arriba, fueron veintidós mil.

Luego de contar a los levitas, también se contaron a los primogénitos, para sustituirlos: 
(Números 3:40-41) Y Jehová dijo a Moisés: Cuenta todos los primogénitos varones de los hijos de Israel de un mes arriba, y cuéntalos por sus nombres. Y tomarás a los levitas para mí en lugar de todos los primogénitos de los hijos de Israel, y los animales de los levitas en lugar de todos los primogénitos de los animales de los hijos de Israel. Yo Jehová.

El resultado del conteo fue el siguiente: 
(Números 3:42-43) Contó Moisés, como Jehová le mandó, todos los primogénitos de los hijos de Israel. Y todos los primogénitos varones, conforme al número de sus nombres, de un mes arriba, fueron veintidós mil doscientos setenta y tres.

En resumen:
LEVITAS: 22,000
PRIMOGÉNITOS: 22,273
Diferencial = 273

RESCATE DEL DIFERENCIAL
Para que las cuentas estuvieran cabales, Dios pidió que se pagara un rescate (tal como se hace en la Redención de los Primogénitos), para cubrir el diferencial entre el número de primogénitos y el número de levitas (Números 3:44-51). 
(Números 3:46-47) Y para el rescate de los doscientos setenta y tres de los primogénitos de los hijos de Israel, que exceden a los levitas, tomarás cinco siclos por cabeza; conforme al siclo del santuario los tomarás. El siclo tiene veinte geras.

El pago del rescate debía darse a los sacerdotes (Aarón y sus hijos).
(Números 3:48-50) Y darás a Aarón y a sus hijos el dinero del rescate de los que exceden. Tomó, pues, Moisés el dinero del rescate de los que excedían el número de los redimidos por los levitas, y recibió de los primogénitos de los hijos de Israel, en dinero, mil trescientos sesenta y cinco siclos, conforme al siclo del santuario.


El pago final del rescate, para cubrir el diferencial, fue de: 1365 shekels (273 primogénitos extra x 5 shekels por primogénito).


En el próximo capítulo (Números 4) estudiaremos los últimos detalles de la organización de la Tribu de Levi…


*** 
Más estudios de este libro: NUMEROS




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Son bienvenidos los comentarios...bajo el entendido que se hagan con respeto