Fue hasta
después de encontrar mujer para su hijo Isaac, y así asegurar la descendencia
de la simiente prometida, que Abraham pensó en su propia necesidad de compañía.
(Gen. 25:1) Abraham volvió
a tomar mujer, y su nombre era Cetura.
Con ella tuvo
seis hijos:
(Génesis 25:2) Ella le dio
hijos: Zimram, Jocsán, Medán, Madián, Isbac y Súa.
Aquí no sólo
se mencionan los hijos de Cetura, sino también algunos de sus descendientes:
(Génesis 25:3-4) Jocsán fue el
padre de Seba y de Dedán. Los hijos de Dedán fueron Asurim, Letusim y
Leumim. (4) Los hijos de Madián fueron Efa, Efer, Hanoc,
Abida y Elda. Todos estos fueron los hijos de Cetura.
Estos
descendientes de Abraham se convirtieron luego en tribus que poblaron Arabia.
AÑADIÓ ABRAHAM
El capítulo
25 comienza de una forma curiosa en hebreo, que se pierde en la traducción.
Dice: “VaYasaf Abraham…” que literalmente significa: “Y
añadió o incrementó, Abraham…”
Parece
irónico que en el capítulo en que se menciona la muerte de Abraham se hable de
que él continuó aumentando, incrementando.
Aun cuando una persona muere, su legado sigue a través de su
descendencia, y esto es lo que vemos en este capítulo.
También nos
enseña que aun tarde en la vida uno puede seguir siendo productivo.
(Eclesiastés
11:6) De
mañana siembra tu semilla y a la tarde no des reposo a tu mano, porque no sabes
si esto o aquello prosperará, o si ambas cosas serán igualmente buenas.
HERENCIA EN ORDEN
Otra gran
lección de vida que encontramos en este capítulo es la sabiduría de dejar los
asuntos de la herencia arreglados antes de morir.
A pesar que
Abraham tuvo más hijos, él decidió que su único heredero sería Isaac, porque él
era el heredero espiritual de la promesa.
Sin embargo, también veló por sus otros hijos.
(Génesis 25:5-6) Abraham dio a
Isaac todo lo que poseía. (6) A los hijos de sus concubinas Abraham les dio
regalos, viviendo aún él, y los envió lejos de su hijo Isaac hacia el este, a
la tierra del oriente.
Los otros
hijos no se fueron desprovistos, pues se les dio bienes materiales. Sin embargo, Abraham dejó claro que la
herencia espiritual, la promesa divina de la tierra, era para el hijo de la
promesa.
Lo mismo había
sucedido con Ismael.
(Génesis 21:10-13) y dijo a
Abraham: Echa fuera a esta sierva y a su hijo, porque el hijo de esta sierva no
ha de ser heredero juntamente con mi hijo Isaac. (11) Y
el asunto angustió a Abraham en gran manera por tratarse de su hijo. (12) Mas
Dios dijo a Abraham: No te angusties por el muchacho ni por tu sierva; presta
atención a todo lo que Sara te diga, porque por Isaac será llamada tu
descendencia. (13) Y también del hijo de la sierva haré una
nación, por ser tu descendiente.
Tal vez esto “ofenda”
a algunos, porque parece injusto. Pero
sabemos que Dios es perfectamente justo, y hay una buena razón para lo que Él
pide. Podemos tratar de entender la
mente de Dios, pero no siempre lo lograremos porque nuestra mente es
limitada. Pero sabemos que Dios tiene
sus razones…
Pablo toca este
tema en Romanos.
(Romanos
9:6-16) Pero
no es que la palabra de Dios haya fallado. Porque no todos los descendientes de
Israel son Israel; (7) ni son todos hijos por ser descendientes de
Abraham, sino que por Isaac será llamada
tu descendencia. (8) Esto es, no son los hijos de la carne los que
son hijos de Dios, sino que los hijos de la promesa son considerados como
descendientes. (9) Porque esta es una palabra de promesa: Por
este tiempo volveré, y Sara tendrá un hijo.
(10) Y no sólo esto, sino que
también Rebeca, cuando concibió mellizos de uno, nuestro padre Isaac (11)
(porque cuando aún los mellizos no habían nacido, y no habían hecho
nada, ni bueno ni malo, para que el propósito de Dios conforme a su elección
permaneciera, no por las obras, sino por aquel que llama), (12)
se le dijo a ella: El mayor servirá al menor. (13)
Tal como está escrito: A Jacob amé, pero a Esaú aborrecí. (14)
¿Qué diremos entonces? ¿Que hay injusticia en Dios? ¡De ningún modo! (15)
Porque El dice a Moisés: Tendré misericordia del que yo tenga
misericordia, y tendré compasión del que yo tenga compasión. (16)
Así que no depende del que quiere ni del que corre, sino de Dios que
tiene misericordia.
La parte más
valiosa de la herencia que Isaac recibió de Abraham no era tanto lo material
como el llamado y el pacto. Era una
herencia espiritual, y la decisión no era propiamente de Abraham sino de Dios. La Tierra es de Dios, y Él decide a quién se
la da.
La realidad
es que Abraham no los echó de “su propiedad”—porque aún no poseían la
tierra. Lo que hizo fue separar a sus
hijos porque cada uno de ellos tenían diferentes destinos…
A los hijos
de Cetura les fue dado bienes, “regalos”, como herencia. Pero no tenía sentido que permanecieran en
una tierra donde eran “extranjeros”. A
ellos se les estaba dando la libertad de “hacer su vida” donde quisieran. Así lo hicieron. En lugar de ser siervos en tierra ajena
fueron amos de su destino en tierras nuevas.
Ellos se dirigieron al oriente, donde aún habían muchos lugares
deshabitados. Allí fundaron sus propios
pueblos y ciudades, mientras que otros se dedicaron a comerciar, llevando una
vida nómada. Muchos pueblos de Asia
Menor (Turquía), Arabia y el Medio Oriente llevan los nombres de los otros
hijos de Abraham.
Según
el historiador Josefo, Efer invadió Libia, al norte de
África, y en su honor le fue puesto el nombre al continente de “África”.
En contraste,
Isaac debía permanecer en la
Tierra de Canaán como extranjero, porque él tenía un llamado,
un propósito, un destino en la tierra que aún no poseían.
Isaac y sus
medio hermanos no debían vivir juntos como “una tribu”, sino cada quien aparte,
cumpliendo cada quien su propósito.
Isaac tenía un llamado espiritual.
Él y su descendencia debían apartarse de las demás naciones para formar
un pueblo separado, santo para Dios. Por
eso Dios los llevó a vivir como “extranjeros” en Canaán y en Egipto, hasta
hacer de ellos una nación.
GENEALOGÍA DE ISMAEL
En este
capítulo también encontramos la genealogía de Ismael:
(Génesis 25:12-16) Estas son las
generaciones de Ismael, hijo de Abraham, el que Agar la Egipcia , sierva de Sara,
le dio a Abraham. (13) Estos son los nombres de los hijos de Ismael,
nombrados por el orden de su nacimiento: el primogénito de Ismael, Nebaiot,
después, Cedar, Adbeel, Mibsam,
(14) Misma, Duma, Massa, (15)
Hadar, Tema, Jetur, Nafis y Cedema.
(16) Estos fueron los hijos de
Ismael, y éstos sus nombres, por sus aldeas y por sus campamentos: doce
príncipes según sus tribus.
Es curioso
que también los descendientes de Ismael llegaron a formar 12 tribus, al igual
que también lo hará Israel.
Ismael vivió
muchos años: 137 en total.
(Génesis 25:17-18) Estos fueron
los años de la vida de Ismael: 137 años. Murió, y fue reunido a su pueblo. (18)
Sus descendientes habitaron desde Havila hasta Shur, que está enfrente
de Egipto, según se va hacia Asiria. Se establecieron allí frente a todos sus
parientes.
Sus
descendientes poblaron el desierto entre Israel y Egipto, y también parte de
Arabia. La mayoría de ellos eran
nómadas, y algunos mercaderes.
En la próxima
entrada veremos qué pasó con Isaac, el hijo de la promesa…
Excelente informacion. Esta página me ayuda sobremanera a entender mejor la biblia
ResponderEliminarDios les bendiga,me gustan sus estudios de la Biblia, como debe ser, muy ordenados,pura Biblia, y especificando los acontecimientos; gracias por ponerlos a nuestra disposición que nuestro precioso Dios los siga bendiciendo mucho mas,en todas las areas de sus vidas.
ResponderEliminarDios les bendiga,me gustan sus estudios de la Biblia, como debe ser, muy ordenados,pura Biblia, y especificando los acontecimientos; gracias por ponerlos a nuestra disposición que nuestro precioso Dios los siga bendiciendo mucho mas,en todas las areas de sus vidas.
ResponderEliminarExcelente, me gusta mucho me ayuda bastante en el estudio de la Biblia, Muchas gracias por estas informaciones y por los comentarios de la Biblia. que Dios los bendiga
ResponderEliminarDios bendiga su vida, son de mucha bendicion, estoy compartiendo cada estudio con mi familia, y es bien explicado y edificante, Dios le continue dando sabiduria,
ResponderEliminar¡Qué bendición que lo comparta con su familia! Nuestro deseo es que la Palabra de Dios se multiplique, y le animamos a seguir adelante. ¡Bendiciones!
EliminarAna BC (Estudio Biblia)
Ha sido de gran ayuda para el estudio de éste capítulo de Génesis,, Dios los siga utilizando, como bendición para otros estudios
ResponderEliminarExcelente!! me encanta como esponen me ayuda más a entender mis estudios, Dios me los bendiga grandemente
ResponderEliminarEs una bendición poder escudriñar La Palabra con la ayuda de sus estudios Bíblicos
ResponderEliminarGracias
ResponderEliminar2020.... Aquí estamos arreciando
ResponderEliminarExcelente, Dios le continúe dando sabiduría para q nos ayude a comprender mejor la Escritura. Bendiciones y muchas gracias, me ha ayudado mucho
ResponderEliminarMagnífico, el señor me habló atra vez de este estudio muchas gracias que nuestro amado Dios le siga iluminando más y le conceda las bendiciones que para usted.
ResponderEliminarAmen gloria al Señor Jesús que me guía al encontrar esta página para entender mejor el mensaje de la biblia. Dios los siga bendiciendo.
ResponderEliminarYo vine a investigar, para tener más claridad con lo que pasa entre Israel y Palestina.
ResponderEliminarBendiciones herman@s, pido oracion para que Dios me dé sabiduría para poder entender más y más la Santa Biblia.
ResponderEliminarBendiciones Amadas hnas y hnos Ami me alludado mucho y aprendido en mi eStudio biblico.y Dios nos habra El entendimiento y nos haga sabios espirituales en El conocimiento de su palabra🙏
ResponderEliminarBendiciones, exelente.
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