HISTORIA
A
comparación con las otras ciudades de Asia Menor, Tiatira no era muy grande ni
contaba con grandes atracciones como las demás. Esta era una ciudad pequeña
localizada en un valle. No se encontraba en la costa sino en el campo, en camino
hacia Pérgamo.
Tiatira
era un centro comercial por encontrarse en una de las principales rutas de
comercio de ese tiempo. Contaba con gremios de panaderos, herreros, alfareros,
curtidores, tejedores y otros oficios. En ese tiempo, los creyentes tenían
conflicto con ciertas prácticas de los gremios, ya que obligaban a los miembros
a participar en actividades paganas, tales como ofrendas a los dioses y comida
ofrecida a los ídolos, y otros ritos que podían incluir actos inmorales. Como
veremos más adelante, en el mensaje de Jesús a esta iglesia, es evidente que algunos
creyentes de Tiatira cayeron en prácticas paganas, y saldrá a luz qué los llevó
a hacerlo.
DESCRIPCIÓN
DE JESÚS
La
forma en que el Señor se presenta a esta iglesia es de la siguiente manera:
(Apocalipsis
2:18) Y
escribe al ángel de la iglesia en Tiatira: El Hijo de Dios, el que tiene ojos
como llama de fuego, y pies semejantes al bronce bruñido, dice esto:
Analicemos
ahora cada una de estas descripciones:
a. Hijo de Dios
La
expresión más común de Jesús en Apocalipsis es “hijo de hombre”, pero aquí se
describe como: Hijo de Dios, lo cual resalta la deidad de Jesús.
Los
ciudadanos de Tiatira entendían bien este mensaje, pues era un concepto que
manejaban a diario. Una de las principales deidades locales era Apolos, y también
adoraban al César de Roma. A ambos se les llamaba “hijos de dios”, pues
creían que ambos eran hijos del dios Zeus. Entendiendo esto ellos, Jesús se les
presentó, no como el hijo de un dios, sino del Dios Todopoderoso y Soberano,
creador del Cielo y la Tierra.
b. Ojos como llama de fuego
Lo que
antes se consideraba como una “llama de fuego”, hoy podríamos llamarlo “láser”. La luz del láser penetra con facilidad a
través de cualquier superficie. Los ojos del Señor no sólo ven lo que está en
la superficie, sino penetran hasta lo más profundo del alma. El no sólo ve
nuestros actos, sino conoce las intenciones del corazón. Esta expresión nos
habla del poder penetrante de la vista del Señor.
(Apocalipsis
2:23) …y
todas las iglesias sabrán que yo soy el que escudriña las mentes y los
corazones, y os daré a cada uno según vuestras obras.
Los
ojos del Señor ven todo; y no se le pasará por alto nada, sea bueno o malo. (Efesios
5:13) Pero todas las cosas se hacen visibles cuando
son expuestas por la luz, pues todo lo que se hace visible es luz.
La
iglesia de Tiatira necesitaba oír esto porque hay cosas que debían
cambiar. Ellos creían que se estaban
“saliendo con la suya”, pero el Señor les dice que Él lo ve todo.
(Hebreos
4:13) Y
no hay cosa creada oculta a su vista, sino que todas las cosas están al
descubierto y desnudas ante los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.
(Jeremías
17:10) Yo,
el Señor, escudriño el corazón, pruebo los pensamientos, para dar a cada uno
según sus caminos, según el fruto de sus obras.
Dios
nos da la oportunidad de arrepentirnos, pero si no lo hacemos, tendremos que
dar cuentas de nuestras acciones. Si la corrección del Señor tarda, no es
porque se le pase por alto, sino porque nos está dando tiempo para
arrepentirnos (2 Ped. 3:9). En Su segunda venida, Jesús vendrá a hacer
justicia. Traerá juicio, es decir, traerá recompensa al que ha hecho el bien y
castigo al que no se ha arrepentido. La iglesia necesita escuchar este mensaje,
ya que el juicio comenzará por la casa de Dios (1 Ped. 4:17), luego vendrá el
juicio a las naciones.
c. Pies semejantes al bronce bruñido
El
bronce bruñido es aquel que ha sido pulido de tal forma que queda brillante y
lustroso. Y la forma de pulirlo y purificarlo
es sometiéndolo a altísimas temperaturas (como el oro y la plata).
(Apocalipsis
1:15) sus pies semejantes al bronce
bruñido cuando se le ha hecho refulgir en el horno...
En la
Biblia, el bronce representa juicio. La imagen de Jesús con los pies de bronce
representa que el Señor traerá el fuego del juicio, quemando lo malo y sacando
el brillo a lo bueno y valioso.
Esta es
una imagen muy diferente a la que muchos tienen de Jesús, quien en su primera
venida se presentó como el Mesías Sufriente, el Cordero de Dios que vino
humildemente a dar su vida por nosotros. Pero en su Segunda venida llegará como
el Mesías Rey, quien derrotará a sus enemigos y someterá a toda la Tierra bajo
su autoridad.
El
profeta Daniel también recibió la revelación del Señor de una forma similar a
la de Juan:
(Daniel
10:6) Su
cuerpo era como de berilo, su rostro tenía la apariencia de un relámpago, sus
ojos eran como antorchas de fuego, sus brazos y pies como el brillo del bronce
bruñido, y el sonido de sus palabras como el estruendo de una multitud.
MENSAJE
A LA IGLESIA
El
mensaje a la iglesia de Tiatira es el más largo de todas las iglesias de
Apocalipsis; curiosamente ésta era la iglesia más pequeña.
En su
mensaje a esta iglesia, Jesús comienza afirmando lo positivo que tienen:
(Apoc.
2:19) Yo
conozco tus obras, y amor, y fe, y servicio, y tu paciencia, y que tus obras
postreras son más que las primeras.
a. Amor
Lo
primero por lo que el Señor felicitó a la iglesia en Tiatira es por su amor (en
griego: ágape. De todas las virtudes espirituales, ellos escogieron la mayor,
como dice Pablo:
(1 Corintios
13:13) Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el
mayor de ellos es el amor.
Pero,
como veremos más tarde, el problema es que muchos en la iglesia de Tiatira perdieron
la perspectiva, y del amor cayeron a la tolerancia. Mucha gente confunde el
amor con la tolerancia. Debemos amar al pecador, pero no el pecado. El verdadero
amor busca el bien del otro, lo cual incluye confrontar y exhortar cuando sea necesario.
Pero los creyentes en Tiatira prefirieron “no herir” a los que estaban
desviados, para evitar conflicto. Eso no es amor, sino tolerancia.
Hoy en
día, uno de los valores más populares es la “tolerancia”. Aunque puede
ser considerada como una virtud, llega un punto en que la tolerancia se puede
desviar y convertir en pecado. La clave
está en lo que uno “tolera”. Hay cosas
que uno puede resistir por amor, pero hay otras que la Biblia dice que no
debemos tolerar. Vemos los dos extremos en los casos de las iglesias de Éfeso y
Tiatira: En Éfeso, no toleraron lo falso, pero habían perdido el primer amor
(Apoc. 2:2,4); por el contrario, en Tiatira tenían amor, pero habían tolerado el
pecado (Apoc. 2:20). Ambas iglesias se habían ido a extremos; pero la clave
está en encontrar el balance entre el amor y la justicia.
b. Servicio
En
griego se usa la palabra “diakonia”, que se refiere al
ministerio, el servicio o la ayuda a los demás. Esta era una iglesia que se
enfocaba en servir y ayudar a sus miembros, y mantenerlos contentos. Igual que
con el amor, el servicio es una virtud positiva, pero puede desviarse si “quedar
bien con la gente” se vuelve más importante que agradar a Dios.
c. Fe
Otra
virtud de la iglesia de Tiatira es la fe, traducida del griego: “pistis”,
que también se puede traducir como: persuasión, convicción, fidelidad. Tener fe
es creer, pero también actuar, ya que “la fe sin obras es muerta”
(Santiago 2:26). Las obras es lo que demuestra en qué creemos verdaderamente. Jesús
señaló que la iglesia de Tiatira tenía fe y era fiel, pues sus obras postreras
fueron mayores que las primeras.
d. Paciencia
o perseverancia
Otra
virtud de la iglesia de Tiatira es la perseverancia (gr. Jupomoné). Ellos fueron constantes, pacientes y
perseverantes. Esta virtud los llevó a hacer “obras mayores que las primeras”.
Aunque
la iglesia de Tiatira tenía cosas muy buenas, también se había desviado en
otras de forma muy seria. En la próxima entrada leeremos el llamado de atención
que Jesús les da…
Estudios de otros capítulos en la
pestaña: APOCALIPSIS
Gracias por este estudio, me encantó, bendiciones! Y adelante por mas!🙏
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