Páginas

miércoles, 28 de mayo de 2014

HECHOS 10. Pedro y Cornelio


Mientras que Pedro estaba visitando y enseñando a los creyentes en Jope (heb. Yafo), en un puerto al norte un hombre romano recibió una visión divina que lo conectaría con Pedro…
(Hechos 10:1) Había en Cesarea un hombre llamado Cornelio, centurión de la cohorte llamada la Italiana. 

Cornelio era un centurión romano, es decir, un militar romano que tenía a su cargo un centenar de soldados. El estaba localizado en Cesarea, que era un gran puerto que los romanos habían construido en la costa de Israel (actualmente localizado entre Tel Aviv y Haifa).  Este puerto fue construido por Herodes el Grande, y fue dedicado a César Augusto.  Alrededor del puerto creció la ciudad de Cesarea Marítima, la cual se convirtió en sede de los romanos en la Provincia de Judea (una de las colonias del imperio romano, cuyo nombre fue posteriormente cambiado a “Siria Palestina” en el año 134, como reacción a las revueltas de los judíos en la región). 

La relación entre judíos y romanos no era la más cordial en el tiempo de los Hechos.  Por eso podría parecer extraña la descripción que se hace de Cornelio, el centurión romano…
(Hechos 10:1-2) Había en Cesarea un hombre llamado Cornelio, centurión de la cohorte llamada la Italiana,  (2)  piadoso y temeroso de Dios con toda su casa, que daba muchas limosnas al pueblo judío y oraba a Dios continuamente. 

Evidentemente, Cornelio era creyente en el Dios de Israel…él y toda su casa.  Él no escondía su fe, sino la vivía en pleno, no sólo de palabra sino de hecho.  Lucas se refiere a él como “piadoso y temeroso de Dios”.  La única otra ocasión en que Lucas usa la palabra que se traduce como “piadoso” (gr. Eusebes) es en relación a Ananías, “hombre piadoso según las normas de la ley, y de quien daban buen testimonio”(Hechos 22:12)

Es interesante notar que aunque Cornelio estaba en Cesarea y no en Jerusalén, él oraba a la misma hora en la que se hacían en el Templo las oraciones diarias del sacrificio continuo (heb. KorbanTamid; Exo 29:38-42), esto es a las 9 am (hora tercera de los romanos) y a las 3 pm (hora novena). 

Mientras que Cornelio se disponía a hacer la oración de la tarde, el Señor le mandó un mensaje a través de un ángel…
(Hechos 10:3-6)  Como a la hora novena del día, vio claramente en una visión a un ángel de Dios que entraba a donde él estaba y le decía: Cornelio.  (4)  Mirándolo fijamente y atemorizado, Cornelio dijo: ¿Qué quieres, Señor? Y él le dijo: Tus oraciones y limosnas han ascendido como memorial delante de Dios.  (5)  Despacha ahora algunos hombres a Jope, y manda traer a un hombre llamado Simón, que también se llama Pedro.  (6)  Este se hospeda con un curtidor llamado Simón, cuya casa está junto al mar. 

Aunque Cornelio era romano, él quería saber más de Dios.  Pero por ser gentil, el acceso al Templo y a los judíos era limitada para él.  No obstante, Cornelio oró a Dios, y Él le respondió. 

Por muy extrañas que le parecieran las instrucciones del ángel, Cornelio respondió y actuó de inmediato…
(Hechos 10:7-8)  Y después que el ángel que le hablaba se había ido, Cornelio llamó a dos de los criados y a un soldado piadoso de los que constantemente le servían, (8) y después de explicarles todo, los envió a Jope. 

Cornelio no escogió a cualquiera para esta misión.  El envió a personas temerosas de Dios. 

PREPARACIÓN DE PEDRO
Mientras los enviados de Cornelio iban en camino, el Señor preparó a Pedro para recibirlos.  Hasta el momento Pedro sólo había ministrado a judíos y a los samaritanos (que eran una mezcla entre israelitas y gentiles), pero nunca a romanos, a quienes los consideraban impuros. Ese rechazo no era por prejuicio racial, ni porque los consideraran sucios físicamente, sino se trata de una “impureza ritual”.  En la Torá están descritas las acciones y cosas que pueden hacer que una persona se vuelva “impura”, y eso le impide poder entrar al Templo, hasta pasar por la debida purificación.  Por ello, muchos judíos se mantenían alejados de los gentiles para no contaminarse…y Pedro era uno de ellos. 

Pedro no se juntaba con gentiles, pero Dios estaba a punto de cambiarle la opinión con una experiencia que lo sacó fuera de su zona de comodidad…
(Hechos 10:9-10)  Al día siguiente, mientras ellos iban por el camino y se acercaban a la ciudad, Pedro subió a la azotea a orar como a la hora sexta.  (10) Tuvo hambre y deseaba comer; pero mientras le preparaban algo de comer, le sobrevino un éxtasis.

Pedro estaba hospedado en la casa de Simón el curtidor, un judío que vivía en Jope.  El subió a la terraza de la casa a mediodía (hora sexta), a la hora del almuerzo.  Es interesante como Dios utiliza las circunstancias naturales de la vida para hablarnos, tal como lo hizo con Pedro…
(Hechos 10:11-14)  y vio el cielo abierto y un objeto semejante a un gran lienzo que descendía, bajado a la tierra por las cuatro puntas;  (12)  había en él toda clase de cuadrúpedos y reptiles de la tierra, y aves del cielo.  (13)  Y oyó una voz: Levántate, Pedro, mata y come.  (14)  Mas Pedro dijo: De ninguna manera, Señor, porque yo jamás he comido nada impuro o inmundo. 

Tal vez Pedro pensó que lo estaban poniendo a prueba, pues tenía mucha hambre.  Pero él sabía muy bien que no debía comer animales impuros, tal como lo señala la Palabra de Dios (Deut. 14).  Leamos lo que dice Levítico al respecto…
(Levítico 11:1-4)  El SEÑOR habló a Moisés y a Aarón, diciéndoles: (2) Hablad a los hijos de Israel, y decidles: Estos son los animales que podréis comer de entre todos los animales que hay sobre la tierra.(3) De entre los animales, todo el que tiene pezuña dividida, formando así cascos hendidos, y rumia, éste comeréis. (4)  Sin embargo, de los que rumian o tienen pezuña dividida, no comeréis éstos: el camello, porque aunque rumia no tiene pezuña dividida; será inmundo para vosotros.
(Levítico 11:9-10)  De todos los animales que hay en las aguas, podréis comer éstos: todos los que tienen aletas y escamas en las aguas, en los mares o en los ríos, podréis comer.  (10) Pero todos los que no tienen aletas ni escamas en los mares y en los ríos, entre todo lo que se mueve en las aguas y entre todas las criaturas vivientes que están en el agua, os serán abominación

Luego añade también las aves de rapiña, los insectos alados de cuatro patas, los animales que se arrastran.

Al final del capítulo termina diciendo:
(Levítico 11:44-47)  Porque yo soy el SEÑOR vuestro Dios. Por tanto, consagraos y sed santos, porque yo soy santo. No os contaminéis, pues, con ningún animal que se arrastra sobre la tierra.  (45)  Porque yo soy el SEÑOR, que os he hecho subir de la tierra de Egipto para ser vuestro Dios; seréis, pues, santos porque yo soy santo. (46)  Esta es la ley acerca de los animales, de las aves, de todo ser viviente que se mueve en las aguas y de todo animal que se arrastra sobre la tierra,  (47)  para hacer distinción entre lo inmundo y lo limpio, entre el animal que se puede comer y el animal que no se puede comer.

Pedro conocía bien todas estas leyes de los animales que se podían comer, y había cumplido con ellas.  Por eso le extrañó en gran manera que una voz del cielo le dijere: “Mata y come”.   Tal vez pensó que el diablo le estaba tentando.  Pero para su sorpresa, la voz del cielo le volvió a hablar:
(Hechos 10:15-16)  De nuevo, por segunda vez, llegó a él una voz: Lo que Dios ha limpiado, no lo llames tú impuro.  (16)  Y esto sucedió tres veces, e inmediatamente el lienzo fue recogido al cielo. 

Pedro estaba confundido, y no entendía lo que la visión significaba, ya que sabía bien lo que estaba escrito en la Palabra de Dios.  ¿Acaso Dios iba a ir en contra de su propia orden? Pedro se preguntaba qué significaba la visión, y la respuesta no tardó en llegar…
(Hechos 10:17-20)  Mientras Pedro estaba perplejo pensando en lo que significaría la visión que había visto, he aquí, los hombres que habían sido enviados por Cornelio, después de haber preguntado por la casa de Simón, aparecieron a la puerta;  (18)  y llamando, preguntaron si allí se hospedaba Simón, el que también se llamaba Pedro.  (19)  Y mientras Pedro meditaba sobre la visión, el Espíritu le dijo: Mira, tres hombres te buscan.  (20)  Levántate, pues, desciende y no dudes en acompañarlos, porque yo los he enviado. 

El Espíritu Santo le reveló que las tres visiones tenían que ver con los tres hombres que llegaban a buscarle.  En términos normales, él no dejaría entrar a la casa a hombres gentiles que eran impuros.  Tampoco se iría con ellos.  Pero el Señor lo preparó con esa visión para recibirlos, escuchar su petición y luego acompañarlos.  
(Hechos 10:21-23)  Pedro descendió a donde estaban los hombres, y les dijo: He aquí, yo soy el que buscáis; ¿cuál es la causa por la que habéis venido?  (22)  Y ellos dijeron: A Cornelio el centurión, un hombre justo y temeroso de Dios, y que es muy estimado por toda la nación de los judíos, le fue ordenado por un santo ángel que te hiciera venir a su casa para oír tus palabras.  (23)  Entonces los invitó a entrar y los hospedó. Al día siguiente se levantó y fue con ellos, y algunos de los hermanos de Jope lo acompañaron. 

Antes, Pedro no se hubiera ido con gentiles.  Pero el Señor preparó su corazón, no sólo para recibir a esos tres enviados y visitar a Cornelio, quien era un creyente en Dios, sino también para romper paradigmas y darse cuenta que el Evangelio se extendería más allá de las fronteras de Israel…

EN CASA DE CORNELIO
Al llegar a la casa de Cornelio, Pedro compartió la revelación que tuvo.  En términos normales, él no habría entrado a la casa de un gentil, pero el Señor estaba abriendo puertas a los gentiles para que entren al Reino de Dios…
(Hechos 10:24-29)  Al otro día entró en Cesarea. Cornelio los estaba esperando y había reunido a sus parientes y amigos íntimos.  (25)  Y sucedió que cuando Pedro iba a entrar, Cornelio salió a recibirlo, y postrándose a sus pies, lo adoró.  (26)  Mas Pedro lo levantó, diciendo: Ponte de pie; yo también soy hombre.  (27)  Y conversando con él, entró y halló mucha gente reunida.  (28)  Y les dijo: Vosotros sabéis cuán ilícito es para un judío asociarse con un extranjero o visitarlo, pero Dios me ha mostrado que a ningún hombre debo llamar impuro o inmundo;  (29)  por eso, cuando fui llamado, vine sin poner ninguna objeción. Pregunto, pues, ¿por qué causa me habéis enviado a llamar? 

¿Qué dice la Torá al respecto?  En realidad, no hay una ley expresa en la Torá que prohiba que un israelita entre en la casa de un gentil.  Lo que está prohibido era hacer alianzas con los gentiles y comer de lo sacrificado a los ídolos, que era común cuando se comía carne en la antigüedad.  Eso sí está escrito en la Torá (Exo. 34:12-16).  La supuesta prohibición de entrar en la casa de los gentiles fue añadida por los rabinos, tal vez como un vallado alrededor de la Torá.  Se había vuelto en una práctica judía común en el tiempo en que los romanos controlaban la Tierra Santa (Ej. Juan 18:28).  Son esos muros hechos por hombres los que separan a los judíos de los cristianos.  Jesús derribó esos muros de separación (Efe. 2:13-22), lo cual se confirma con la historia de Pedro y Cornelio. 


RESPUESTA A LA ORACIÓN
La visita de Pedro fue la respuesta a la oración de Cornelio. 
(Hechos 10:30-32)  Y Cornelio dijo: A esta misma hora, hace cuatro días, estaba yo orando en mi casa a la hora novena; y he aquí, un hombre con vestiduras resplandecientes, se puso delante de mí,  (31)  y dijo: Cornelio, tu oración ha sido oída, y tus obras de caridad han sido recordadas delante de Dios.  (32)  Envía, pues, a Jope, y haz llamar a Simón, que también se llama Pedro; él está hospedado en casa de Simón el curtidor, junto al mar.

Tal vez Cornelio no sabía la razón por la que Pedro debía llegar con ellos ni sospechaba lo que él les hablaría, pero él sabía que el Señor le había indicado invitar al apóstol, y lo hizo…
(Hechos 10:33)  Por tanto, envié por ti al instante, y has hecho bien en venir. Ahora, pues, todos nosotros estamos aquí presentes delante de Dios, para oír todo lo que el Señor te ha mandado. 

No sólo Cornelio y sus amigos tenían algo que aprender.  También Pedro estaba aprendiendo de este proceso. 
(Hechos 10:34-35)  Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: Ciertamente ahora entiendo que Dios no hace acepción de personas,  (35)  sino que en toda nación el que le teme y hace lo justo, le es acepto. 

En la religión judía, para ser “aceptados”, debían pasar por un proceso de conversión que consistía de tres pasos: (1) circuncisión; (2) inmersión; (3) sacrificio.  Esto no está escrito en la Torá, sino son requisitos impuestos por el hombre.  A través de esta experiencia, Pedro se dio cuenta que para entrar en el Reino de Dios, lo que el Señor espera es que “teman a Dios y guarden sus mandamientos” (Deut. 10:12; Ecl. 12:13).
(Deut. 10:12-13)  Y ahora, Israel, ¿qué requiere de ti el SEÑOR tu Dios, sino que temas al SEÑOR tu Dios, que andes en todos sus caminos, que le ames y que sirvas al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma,  (13)  y que guardes los mandamientos del SEÑOR y sus estatutos que yo te ordeno hoy para tu bien? 

En realidad el concepto de que “Dios no hace acepción de personas” no es algo que se inició en el Nuevo Testamento.  No era una idea nueva.  Este principio está escrito desde la Torá—en el mismo trozo de escritura que estábamos leyendo arriba…
(Deuteronomio 10:14-19)  He aquí, al SEÑOR tu Dios pertenecen los cielos y los cielos de los cielos, la tierra y todo lo que en ella hay.  (15)  Sin embargo, el SEÑOR se agradó de tus padres, los amó, y escogió a su descendencia después de ellos, es decir, a vosotros, de entre todos los pueblos, como se ve hoy.  (16)  Circuncidad, pues, vuestro corazón, y no endurezcáis más vuestra cerviz.  (17)  Porque el SEÑOR vuestro Dios es Dios de dioses y Señor de señores, Dios grande, poderoso y temible que no hace acepción de personas ni acepta soborno.  (18)  El hace justicia al huérfano y a la viuda, y muestra su amor al extranjero dándole pan y vestido.  (19)  Mostrad, pues, amor al extranjero, porque vosotros fuisteis extranjeros en la tierra de Egipto.

Pedro y los apóstoles comenzaron a entender que la fe en el Dios de Israel y en Jesús el Mesías (heb. Yeshua HaMashiaj) no era algo exclusivo para los judíos, sino para toda la humanidad.  Esta idea está plasmada desde el llamado a Abraham, cuando el Señor le prometió que todas las naciones de la Tierra serían benditas a través de su descendencia (específicamente una simiente)…
(Génesis 22:16-18)y dijo: Por mí mismo he jurado, declara el SEÑOR, que por cuanto has hecho esto y no me has rehusado tu hijo, tu único,  (17)  de cierto te bendeciré grandemente, y multiplicaré en gran manera tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena en la orilla del mar, y tu descendencia poseerá la puerta de sus enemigos.  (18)  Y en tu simiente serán bendecidas todas las naciones de la tierra, porque tú has obedecido mi voz.

Pablo explica que esa simiente prometida es Cristo…
(Gal. 3:14,16) …a fin de que en Cristo Jesús la bendición de Abraham viniera a los gentiles, para que recibiéramos la promesa del Espíritu mediante la fe…
(16)  Ahora bien, las promesas fueron hechas a Abraham y a su descendencia. No dice: y a las descendencias, como refiriéndose a muchas, sino más bien a una: y a tu descendencia, es decir, Cristo.

Pedro llegó a entender el mensaje de la visión: “Lo que Dios ha limpiado, no lo llames tú impuro” (10:15).  Los judíos consideraban a los gentiles como impuros, pero no debían verlos así ya que el Señor les estaba abriendo a ellos también las puertas del Reino de Dios.  Esa fue la lección para Pedro.  Pero ahora él debía compartir con estos gentiles que creían en el Dios de Israel, quienes estaban listos para escuchar el Evangelio…
(Hechos 10:36-43)  El mensaje que El envió a los hijos de Israel, predicando paz por medio de Jesucristo, que El es Señor de todos;  (37)  vosotros mismos sabéis lo que ocurrió en toda Judea, comenzando desde Galilea, después del bautismo que Juan predicó.  (38)  Vosotros sabéis cómo Dios ungió a Jesús de Nazaret con el Espíritu Santo y con poder, el cual anduvo haciendo bien y sanando a todos los oprimidos por el diablo; porque Dios estaba con El.  (39)  Y nosotros somos testigos de todas las cosas que hizo en la tierra de los judíos y en Jerusalén. Y también le dieron muerte, colgándole en una cruz.  (40)  A éste Dios le resucitó al tercer día e hizo que se manifestara,  (41)  no a todo el pueblo, sino a los testigos que fueron escogidos de antemano por Dios, es decir, a nosotros que comimos y bebimos con El después que resucitó de los muertos.  (42)  Y nos mandó predicar al pueblo, y testificar con toda solemnidad que este Jesús es el que Dios ha designado como Juez de los vivos y de los muertos.  (43)  De éste dan testimonio todos los profetas, de que por su nombre, todo el que cree en El recibe el perdón de los pecados. 

Mientras Pedro hacía su parte, compartiendo las Buenas Nuevas del Evangelio, el Espíritu Santo hizo también su parte…
(Hechos 10:44-48)  Mientras Pedro aún hablaba estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos los que escuchaban el mensaje.  (45)  Y todos los creyentes que eran de la circuncisión, que habían venido con Pedro, se quedaron asombrados, porque el don del Espíritu Santo había sido derramado también sobre los gentiles,  (46)  pues les oían hablar en lenguas y exaltar a Dios. Entonces Pedro dijo:  (47)  ¿Puede acaso alguien negar el agua para que sean bautizados éstos que han recibido el Espíritu Santo lo mismo que nosotros?  (48)  Y mandó que fueran bautizados en el nombre de Jesucristo. Entonces le pidieron que se quedara con ellos unos días.

Al final, Pedro no sólo visitó la casa de Cornelio por un día, sino que se quedó más tiempo para enseñarles y compartirles del Señor.



31 comentarios:

  1. Doy gracias a Dios por ésta reflexión. Dios les continúe dando de su infinita sabiduría para instruir su pueblo. Jehová Dios y Jesucristo Señor y Rey de gloria les bendiga siempre!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Que privilegio tan geande de ser hijo del altisimo de Jehova de los ejercito muy buena la enseñanza biblica ...Dios los bendiga

      Eliminar
  2. Gracias por compartir, ahora me han surgido unas dudas; ¿Qué pasó con Cornelio después? , ¿Cómo murió? ... Espero me puedan orientar un poco más sobre la vida de él, gracias :)

    ResponderEliminar
  3. Claramente la palabra de Dios nos enseña una vez más es este caso que las buenas obras no son suficiente para ser salvos sino que debemos por fe recibir a Cristo Jesus como Salvador,Cornelio era piadoso temeroso de Dios hacia buenas obras como limosnas sin embargo no fue salvo hasta que recibió a Cristo cuando escucho el Evangelio, por eso fue necesario que Pedro le predicase

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Entonces si se ocupa un apostol de jesucristo en estos tiempos???

      Eliminar
  4. Agradezco a Dios por los autores de estas enseñanzas y por su sabia descripción. Debo reconocer que la palabra es tan poderosa para transformar los corazones y por esa razón, ustedes se convierten en instrumentos transformadores de Vida. Gracias.

    ResponderEliminar
  5. Ana primeramente agradezco al Padre Eterno haberme guiado hasta tu blog, en otro termino, no necesitas ser teologa para participar de la Palabra Divina, muestra de ello es tu gran amor por conocer más y en su contexto historico, ya que aludes a palabras en hebreo y su significado, no sé qué traducción de la biblia utilizas porque en ocasiones refieres a Yehova que realmente es YHWH, como los grigos lo llaman; en fin lo más hermoso es como el Principe de paz te ha usado para su Gloria. Bendiciones.

    ResponderEliminar
  6. exelente su exposicion de la palabra dios lo siga usando para su gloria y honra DTB

    ResponderEliminar
  7. hola he leido tu blog sobre pedro y cornelio, y me parece muy muy bueno se nota que has estudiado mucho la palabra de dios y bueno, espero que dios te siga usando en gra manera DTB

    ResponderEliminar
  8. Que bendicion... el mover del Espiritu Santo en esa epoca fue sobrenatural y tambien para este tiempo lo sigue haciendo ...es decir cuando se hospeda en nuestra casa un hombre de DIOS eso provoca una manifestacion gloriosa en el hogar y hay que manifestarla a nuestra familia y aun a los vecinos...DIOS lo hace con ese proposito

    ResponderEliminar
  9. Qur hermoso.este pasaje de la biblia
    Me.enseño.mucho.por que no.entendia su significado pero con.este estudio biblico aprendi muchas gracias me gustaria seguir sus estudios Dios la siga bendiciendo y usando para la GLORIA DE SU NOMBRE CRISTO VIVE Y VIENE PRONTO

    ResponderEliminar
  10. Dios te bendiga escudriñar las escrituras bajo el poder del E.S. es de gran bendición.

    ResponderEliminar
  11. Me ha gustado mucho tu estudio hermana.lo Estoy leyendo paso a paso.
    Gracias por tu esfuerzo y dedicación.

    ResponderEliminar
  12. Gracias, aprdndí mucho, gracias a Dios pude resolver algunas dudas.

    ResponderEliminar
  13. Analisemos la vida de Cornelio en este blog de como era y como era su forma de vivir sin duda un hombre bueno con muchas virtudes sin embargo le hacia falta una cosa, que era? a nuestro señor Jesucristo, pero por medio de quien? el Apostol Pedro, el le declaro la manera de como iba a ser esto posible. Asi que afirmo es necesario un Apostol (enviado de Dios) Mt 11.27 - Galat 1.16. A quien por revelacion nos trae el conocimiento de su doctrina (no por sabiduria humana 1 Corint 2.4-5). Dios los bendiga LLDM

    ResponderEliminar
  14. Tengo una pregunta aquí en el libro de Hechos veo que se bauizaban en el nombre de Jesús y en libro de Mateo dice Padre, y del hijo y del Espíritu Santo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En el libro de los Hechos de los apostoles, siempre se bautizó en el Nombre de Jesús. Los apostoles tenian amplia experiencia bautizando. De hecho en Juan 4 se muestra que ellos bautizaban desde la epoca de Juan Bautista:
      1Por tanto, cuando el Señor supo que los fariseos habían oído que El hacía y bautizaba más discípulos que Juan 2(aunque Jesús mismo no bautizaba, sino sus discípulos)...

      Eliminar
  15. muy hermoso el estudio biblico , porque me encanta la historia de pablo , y pedro hijos de DIOS viviente , alabdo sea DIOS

    ResponderEliminar
  16. Preciosa reflexión, y es un estudio que me despejó muchas dudas, doy Gracias a Dios, por todo este estudio, y ¿Cómo se describe la forma de demostrar la Misión de Dios en Cornelio?

    ResponderEliminar
  17. Linda palabra de Dios

    ResponderEliminar
  18. Le bendigo en nombre de Nuestro Señor Jesucristo.
    Que El Espiritu Santo le continu usando como instrumento de.su palabra,le recomiendo la Biblia Textual IV Ed.La unica mas cercana a los originales.

    ResponderEliminar
  19. me sumo a la gratitud de todos quienes hemos sido bendecidos por estos comentarios .

    ResponderEliminar
  20. Amén 🙏 Dios les bendiga 🙏

    ResponderEliminar
  21. Gracias a DIOS por sus vidas no entendia este versiculo de pedro y cornelio yo pence que podiamos comer de toda carne porque DIOS ya la habia pueificado y veo en esta explicasion que no es asi gracias bendiciones 🙏

    ResponderEliminar

Son bienvenidos las dudas y comentarios (con el entendido que se hagan con respeto)...